Postillón

El bergantín correo Postillón, mandado por el teniente de navío D. Ramón Pardo de Lama se perdió completamente a la una y cuarto de la noche del 12 de julio en el bajo de San Nicolás (Canal Viejo de Bahama), con las mejores circustancias de brisa y mar.

Al chocarse con el bajo, se perdió la quilla por completo y se anegó. La gente saltó al Cayo Sardinero donde formaron barracas con las velas, depositaron víveres y agua, incendiaron la parte del casco que quedó fuera del agua, consiguieron extraer todos los frascos del azogue que iban destinados a Veracruz, el aparejo y alguna artillería.

El día 29 llegó una goleta en auxilio de los náufragos. A su llegada a La Habana se formó el proceso consiguiente de la pérdida. El fiscal aclaró el enigma del accidente al darse cuenta que las marcaciones de la tarde del 12, que se suponía hechas a la boca de Sagua la Grande, concordaban perfectamente con las de Sagua la Chica, equivocada por el práctico del Postillón.

El consejo de querra lo sentenció a perder la plaza, declarando libre de cargo al comandante.